Feng Shui

El Feng shui es el antiguo arte chino que consiste en equilibrar energías mediante la integración de las personas, los edificios y el paisaje para crear un conjunto armónico.

Traducido literalmente, feng shui significa viento y agua. Se basa en el principio según el cual el lugar donde vives y trabajas y la manera en que dispones las habitaciones y los muebles de tu casa pueden afectar a tu salud, riqueza y felicidad.

Una forma sencilla de explicar lo que es el feng shui sería decir que es nuestra respuesta intuitiva al espacio. Todo el mundo sabe lo que se siente cuando decidimos mudarnos y visitamos casas que están en venta. Algunas viviendas no nos gustan, tienen “malas vibraciones”, mientras que otras nos hacen sentir cómodos y tranquilos, en ellas todo parece encajar a la perfección con nosotros.

¿Qué es lo que hace que un edificio o una casa provoquen un efecto semejante ? la combinación de aspectos constructivos y de diseño, el uso del espacio y la moda vigente en decoración de interiores (color, texturas, luz, diseños y sonidos) otorgan vida a un espacio. Lo entenderemos mejor si pensamos que, Tal y como afirma la física cuántica, todo se compone de energía: el universo no es más que energía que vibra  a distintas frecuencias ( algunas de esas frecuencias se pueden ver y otras no ). La energía p chi, fluye en nuestros hogares como un viento invisible. El estudio del feng shui trata de conseguir que esa energía sea de buenas calidad y que siga fluyendo a un ritmo saludable.

En la medicina oriental la fuerza de la energía vital se conoce como qi  o  chi.  Esta energía está constituida por principios yin (pasivos, femeninos) y yang (activos, masculinos).

Los expertos en feng shui  sostienen que la energía vital o qi transportada por el viento y el agua a través del ambiente que nos rodea es importante para nuestro bienestar. Si la energía qi fluye sin impedimentos y de forma equilibrada por nuestras casas y lugares de trabajo, según el feng shui , nosotros nos sentiremos más felices y sanos. El qi bloqueado da lugar a un estancamiento de flujo, lo cual afecta a la salud y a las emociones positivas de la gente que se encuentra en él. E igual de dañina resulta la energía vital que fluye demasiado deprecia porque, como si de una tubería que estallase se tratara, puedes terminar hundiéndote en un mal qi.

El asesor de feng shui hace un estudio general de la situación. Examina la localización de tu casa u oficina así como la forma y tipo del suelo; hacia dónde se hallan orientadas las distintas habitaciones y en qué parte de la casa se encuentran  éstas.

A continuación realiza un gráfico del flujo de qi por la casa o  lugar de trabajo, y estudia si este fljo se ve bloqueado o si se le permite correr demasiado deprisa.

No todos los asesores de feng shui  utilizan los mismos métodos. Algunos de ellos se centran en el lugar donde está situada la casa, en los edificios que la rodean y en la colocación de los muebles en cada habitación.

El bagua es un antiguo mapa de energía que describe los movimientos predecibles de la energía dentro de un espacio. Está dividida en nueve casillas que se colocan sobre el plano de un terreno, de una casa, de un apartamento o incluso de una habitación. Puede adaptarse a cualquier forma por peculiar que sea.

Cada una de las nueve casillas posee una serie de características que permiten identificar si hay espacios negativos en alguna de ellas y lo que es preciso corregir para que la energía fluya.

Otros utilizan una brújula especial rodeada se símbolos I Ching para averiguar qué partes de la casa son las más favorables.

Y otros ,por último, calculan también tus mejores orientaciones y posiciones personales, basándose en los signos del horóscopo chino y en los números de la suerte 

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