miércoles, 25 de mayo de 2016

Escoliosis

 La escoliosis, (desviación de la columna vertebral), es un problema que se puede solucionar o no. Yo mantengo que no se puede solucionar. No voy a enumerar aquí la cantidad de fracasos que se origina desde la traumatología u ortopedia, pero desde luego, el descuido, la falta de atención o los tratamientos inadecuados por su eficacia o por su carga psicológica así lo muestran.

Existen diferentes tipos de escoliosis clasificadas desde su etiología, es decir por qué se producen, pasando por la clasificación de edad, (cronológica), hasta según la gravedad. También por sexo, es decir cómo se transmite la lesión por parte de la madre o del padre.
Lo que es cierto es que la mayoría de las escoliosis son de etiología desconocida, es probable que tenga un origen genético. Se cree que es una disfunción menor en el tronco cerebral... Pero no voy a entrar por aquí, ya que es origen de discusión en la actualidad.

Entonces, qué hacer? Mantenimiento y cuidados alternativos.
Sí, eso que en raras ocasiones se prescribe por parte del médico de turno que sigue cada caso. Y la mayor de las veces es por falta de información de ese "profesional" que nos atiende.
En Masaje deportivo y Osteopatía, lo contemplamos como algo que ya está pero que podemos modificar.

CASO 1: Trabajadora de banca de 52 años, (I.G.A.), viene a consulta recomendada por profesional médico cirujano para que vea su caso de dolores en espalda, cuello, hombros y caderas. Diagnóstico y encuentro, además de una escoliosis dorsal ya diagnosticada anteriormente, es muy obvia, calcificación articular además de todas las descompensaciones que produce esta escoliosis, (joroba de lado izquierdo en su caso; un hombro más alto que otro; cuello y espalda completamente desarticulada).

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Además se complica con una tendinitis en el manguito de rotadores, (serie de músculos del hombro-Figura 1)

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Figura 1
 
Hay, por supuesto, serios bloqueos al movimiento y dolor.

Comenzamos tratamiento el 6 de octubre de 2011, he de decir que con bastante desconfianza por parte de la paciente y con enorme miedo al dolor que podamos producir durante la sesión.

Lo primero que buscamos en osteopatía es eliminar todas las tensiones y lesiones que haya en músculo, en fascia, en ligamento, en tendón, en tejido blando en definitiva. En este caso nos encontramos con serios problemas en musculatura varia del hombro, (romboides mayores y menores; supra espinoso e infra espinoso), y en fascias toraco-lumbares, (una fina capa grisácea de tejido que recubre elementos de sujeción y aporte nutricional al músculo y tendón). (Representados en gris, en la figura 2).

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Figura 2
 
También trabajamos una lumbalgia que la descompensación y la propia provocación del organismo por encontrar una normalidad a lo que ocurre, (homeostasia), ha surgido.

Lo segundo que vamos es al movimiento articular. En el caso que nos ocupa, movimiento de la columna dorsal, y por compensación la columna lumbar y cervical; y diferentes articulaciones del hombro como la escapulo torácica, con su manipulación osteopática por falta de movilidad en algunos de los sentidos

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Cinco sesiones después comienza el organismo a responder y nos envía a la cuarta vértebra dorsal, (D·4), que bloquea por el movimiento que ya se está produciendo y que el propio cuerpo no contaba con ello.

En la sexta sesión una vez reparada la lumbalgia, nos habla el cuerpo diciéndonos que hay un bloqueo en el hueso sacro, (Figura 3)

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Figura 3
 
En la séptima sesión nos cuenta que el hombro derecho necesita desbloquear. Es decir, vemos que el comienzo de movilidad de la columna por elastificación del tejido blando y movilizaciones articulares, nos va indicando los bloqueos que necesitan manipularse con osteopatía y solamente con osteopatía por la nueva vida que va recobrando la espalda, la pelvis, el cuello, en consecuencia, todo el cuerpo.

Qué ocurre con todo esto?

1. Mayor movilidad;
2. Reducción del dolor durante largas temporadas, sobre todo si seguimos un mantenimiento adecuado con masaje y ejercicio;
3. Mayor vascularización de todas las zonas donde actuamos, con lo cual regulamos la irrigación sanguínea, (prevención de lesiones cardio-vasculares?);
4. Mejora estética;
5. Más facilidad para hacer trabajos rutinarios como el conducir u operar con un ordenador.

Seguimos ahora un mantenimiento semanal para no perder nada de lo conseguido, además de que la paciente se sienta cuidada. También hemos conseguido que la paciente tenga ya una confianza absoluta y haya experimentado la falta de dolor en las sesiones que vamos realizando.

Cuando trabajas tan intensamente y durante tanto tiempo con una persona, pueden ocurrir dos cosas:
  1. Que la rutina aburra, o
  2. Adjudicación de un buen hábito.
Cuando ocurre el punto 1 y abandonamos el punto 2, y tenemos un tipo de lesión degenerativa, como el que nos ocupa este artículo, en cualquiera de sus casos, una patología que deforma y que inutiliza, entonces, en este momento se comienza a recorrer una espiral descendente que lleva a tener que soportar un dolor que ya estaba controlado. El paciente busca diferentes maneras de paliar lo que está ocurriendo, olvidando qué es lo que funcionaba. Y decía mi viejo maestro de filosofía, Jim Rhon, lo que funciona no se abandona... nunca. Y cuando se abandona, las pruebas son muy evidentes. Al punto de que su densitometría ha empeorado.

¿Dónde quiero llegar a parar? Nuestra buena amiga de este caso, ha ido abandonando la intensidad del mantenimiento, hasta llegar a un punto de no mantenimiento. Intervalos que van desde una sesión 
  • de 16.11.12., a 6.4.13.  
  • de 6.4.13., a 20.4.13.
  • de 20.4.13 a 17.9.13. (Aquí hay una continuación seguida por una lumbalgia aguda)
  • de 27.9.13., a 29.11.13.
Siempre la ha traído a mi gabinete esos dolores que lesiones degenerativas y cronificadas se han ido apoderando de la higiene bio-mecánica.

En esta última sesión de 29.11.13., el trabajo que realizamos es amplio. Sedación con masaje, técnicas especificas, (Cyriax y Jones; liberación mio-fascial e integración neuro-vegetativa), en tejido blando, (músculos, fascias y ligamentos); Normalización osteopática de la articulación escaùlo-torácica derecha, campaneo externo, (figura 10). Y hemos terminado con estiramientos musculares.
Hablamos de vernos una vez al mes...

CASO 2: C.C.R., es una joven de 15 años, (estudiante), que la trae su padre a consulta para estudiar su caso de desviación.

 Es un caso muy claro en cuanto a su visión postural,
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Así como su estudio telemétrico,

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Telemetría
 
Es la forma de ver el grado de gravedad de la escoliosis, que se divide en tres fases:

- Fase I: escoliosis leve, (-25º)
- Fase II: escoliosis mediana, (25 a 50º)
- Fase III: escoliosis grave, (+50º)

Comenzamos tratamiento el 11 de Noviembre de 2011, (11.11.11), después del resto de pruebas diagnósticas, por ejemplo, medición de ambas piernas que nos va a mostrar la posibilidad de llevar a la máxima simetría pélvica para que tengamos movimientos óptimos de la columna, así como descarga de tensión en el soporte de la columna.

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Figura 4
 
En la figura 4 vemos una imagen muy aproximada de una escoliosis que nos crea dismetría pélvica, con lo cual las tres cinturas del cuerpo quedan completamente descompensadas, (cintura pélvica; cintura torácica; cintura craneal) Esta es la base de trabajo que tenemos en osteopatía.

Obviamente hay bloqueos articulares en toda la columna, en distintas vértebras que vamos a ir identificando con el tratamiento.

Así, comenzamos con una primera sesión que disociamos en tratamiento de tejido blando por un lado, masaje y rectificación de lesiones de tejido blando, en su caso, (Figura 5):

- Músculos cuadrados lumbares, (bajo el músculo gran dorsal)
- Músculo angular del omóplato derecho, (bajo el músculo trapecio)
- Músculo trapecio derecho en sus fibras superiores
- Músculo infra espinoso izquierdo, (a la altura del omóplato)
- Fascias toraco lumbares, (zona blanquecina)
 
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Figura 5
 
Y vamos, posteriormente a comenzar con las técnicas de normalización osteopáticas para el movimiento, empezando en esta primera sesión por dos de sus vértebras de la columna dorsal, tercera y cuarta, (D·3-D·4).

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Figura 6

Contamos en la Figura 6 siete vértebras desde arriba, (vértebra marcada en rojo), y otras tres y cuatro desde esta última vértebra cervical, (C·7), y descubrimos que es aquí donde se origina su escoliosis, desde la tercera vértebra dorsal, (D·3), que la tiene bloqueada en posición de flexión, (hacia delante el cuerpo de la vértebra), lateralizada hacia su lado izquierdo y rotada hacia su lado derecho, (Figura 7), y su cuarta vértebra dorsal, (D·4), compensando con un bloqueo de extensión, lateralizada y rotada hacia su lado derecho.
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Figura 7

Además, elastificamos todo el tejido de la zona media de la espalda, a la altura descrita.

Vamos a una segunda sesión después de todo este trabajo, cuatro días después, para tratar su dismetría pélvica, que encontramos con un bloqueo en su hueso iliaco del lado izquierdo, en la imagen de la Figura 8 vemos como va a crear una pierna izquierda más larga, que en su caso además es anatómica, es decir, que aún teniendo la pelvis equilibrada en movimiento, pisa más con el lado izquierdo, (42,5 cm. fémur izquierdo; 39,5 cm. fémur derecho)

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Figura 8

El caso ahora está en manos de su médico para que actúe en consecuencia después del cambio metabólico que hemos efectuado en su aparato locomotor.

Volvemos a actuar sobre este caso, pasado un tiempo, ya que con esta edad, (ya ha cumplido los 16), el factor de crecimiento es muy variable y esto hace que tengamos que estar muy vigilantes. Por ejemplo, al comenzar este caso, (11.11.11), tenía unas medidas de:
  • Pierna izquierda: 79 cm.
  • Pierna derecha: 78 cm.
  • Fémur izquierdo: 42,5 cm.
  • Fémur derecho: 39,5 cm.
Vemos en estas primeras medidas, coincidentes con las que realizó su ortopeda, una diferencia más que considerable y problemática de 3 cm., en sus fémures. Veamos la actualidad:
  • Pierna izquierda: 79 cm.
  • Pierna derecha: 78,5 cm.
  • Fémur izquierdo: 43,5 cm.
  • Fémur derecho: 42,8 cm.
Es decir, con la pelvis equilibrada, su cartílago de crecimiento ha ido compensando las simetrías de los hemi-lados, reduciendo la diferencia entre fémures de 3 cm., a 7 mm., incluso el total de ambas piernas, (medición desde las espinas iliacas, antero-superiores, hasta sus maléolos internos; Figura 9), se ha reducido hasta dejar la diferencia en medio centímetro.

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Figura 9

Con esta buena noticia, volvemos a la carga en un tratamiento de corrección, estabilización y elastificación, ósea y de tejido blando, o sea, osteopatía, masaje y estiramiento.

Reabrimos el caso 13 meses después, (27.12.12), de su última sesión.

Sesión 1: actuamos sobre tejido blando lumbar, dorsal y cervical. Reconstruimos la acción muscular y fascial, así como movilizar tejido dorsal que viene bloqueado. 

A continuación, después de haber realizado estiramientos en todas las partes tratadas, vamos con las técnicas de corrección osteopáticas:

- D·6. Nos viene con bloqueo en extensión y lateralización izquierda;
- 6·C, (costilla), que acompañando al movimiento de D·6, (recordamos que en su cara posterior las costillas 1ª a 10ª anclan sobre su correspondiente vértebra torácica), la encontramos con un bloqueo en inspiración en su anclaje izquierdo a la vértebra.
- Articulación escapulo-torácica, en su lado izquierdo. Esta es una falsa articulación que manipulamos desde el omóplato. Su lesión es en aducción, es decir, el omóplato está más aproximado a su columna dorsal.

Estas zonas las indica la figura 10

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Figura 10

Sesión 2: (3.1.13) Seguimos con tan solo dos músculos que nos quedan contracturados y trabajamos el músculo diafragma  (Figura 11), actor de movilidad o tensiones sobre la caja torácica, vértebras, otros músculos menores y vísceras.

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Figura 11
 
Una vez llegados a este punto volvemos a toda la cadena sacro-iliacos-columna, y encontramos bloqueo del hueso sacro, que pasamos a normalizarlo, (lo tenéis en figuras 6 y 8, en la base de la columna), nos ofrece resistencia en su movimiento de eje oblicuo izquierdo-derecho, (Figura 12)

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Figura 12

Siempre que actuamos sobre el hueso sacro, repito la palabra siempre, tenemos que normalizar el movimiento del cráneo con referencia al hueso sacro, y es a lo que vamos en nuestra
 
Sesión 3: (10.1.13) Actuamos sobre los huesos del cráneo por falta de su micro movimiento sobre la S.E.B., (Sínfisis Esfeno-Basilar; Figura 13), huesos parietales y mandíbula, (Figura 14), con diferentes bloqueos de compensación, con esto además de todo lo expuesto, eliminamos dolores de cuello que ha estado sufriendo en los últimos días, (hay que recordar que está en tiempo de exámenes, y esto tensa)

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Figura 13
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Figura 14
 

Es recomendable que leas en este mismo blog sobre migraña, hay una descripción de cómo actúa el S.N.C., (Sistema Nervioso Central), a través de sus pares craneales, cómo influye en el organismo y qué solución le damos con osteopatía.

Las sensaciones de nuestra adolescente paciente se convierten en sensaciones de falta de peso, eliminación de dolor, movimiento a su voluntad y confianza en su estética corporal.

En tan solo 3 sesiones en este caso, hemos vuelto a reproducir normalidad sobre la evolución de su escoliosis  Al estar en periodo de crecimiento  entre otras cosas, iremos revisando cada 3 a 6 semanas.

Vamos a otra tanda de otras 3 sesiones, que realizamos el 21 de Abril, 3 de Mayo y 2 de Agosto de 2014.

Aquí tenemos un estudio de pisada realizada.

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Exacto!!! Su escoliosis y su crecimiento, aún tiene cartílago de crecimiento, nos está marcando diferencias anatómicas en ambas extremidades inferiores.

Las medidas que vuelvo a realizar de pierna entera:
  • Pierna izquierda: 79,3 cm., (antes de sesión);
  • Pierna derecha: 77,0 cm., (antes de sesión).
Si comparamos con las mediciones que hacíamos el 11 de Noviembre de 2011, las tenéis más arriba, observamos que la pierna derecha va "menguando", lo cual no es cierto. La cuestión es que está pisando con menos presión, como se ve en su estudio, y la pelvis va descompensando esa variación de pesos y masas.

En la 1ª sesión, (21.4.14), vamos a descargar musculatura y recomponer su nivel proteico, desfibrando sus músculos:
  • Cuadrados lumbares, (Figura 15);
  • Trapecio derecho, (haces superiores y medios), (Figura 16);
  • Elevador del omóplato izquierdo, (Figura 17), y sus
  • Fascias toraco-lumbares.
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Figura 16
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Figura 15
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Figura 17
 
A nivel osteopático, tuvimos que corregir 1 vértebra dorsal, (D1), y 3 lumbares, (L3-L4-L5), las rotaciones estaban compensadas, hacia la izquierda en la columna dorsal, hacia la derecha en la columna lumbar, (Figuras 6 y 7).

Después de esta sesión sus medidas de piernas son:
  • pierna izquierda: 79,9 cm.
  • Pierna derecha: 78.0 cm.
La recuperación de 6 mm. en pierna izquierda, y 1 cm. en pierna derecha nos acumula una mejor deambulación.

En 2ª sesión, (3.5.14), el trabajo vuelve a ser sobre las contracciones musculares que incidíamos en la sesión anterior, habiendo eliminado el problema de trapecios, y hacemos un amplio trabajo de movilidad fascial en columna dorsal y lumbar, para ya en 3ª sesión, (2.8.14), volvemos a reestructurar la simetría de la pelvis que, después de nuestro test de Downing, y la vista del estudio de su pisada, manipulamos su hueso iliaco izquierdo, que viene anteriorizado, creando una mayor elongación de la pierna izquierda. DE esta manera, al menos la pelvis, queda simétrica.

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Test de Downing
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Cuándo tenemos que actuar como osteópatas ante una escoliosis o antecedentes familiares que nos haga pensar que pueda estar ocurriendo la lesión? Desde el momento que el bebé está concebido y, si es posible, no más tarde de su nacimiento.
 
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Hay que tener en cuenta que la escoliosis congénita se postula que es el resultado de alguna lesión o insulto al cigoto o embrión en el periodo formativo temprano.

Hay que ser muy consciente que además de la intervención del médico, del cirujano y del osteópata, será necesario que haya una actitud de responsabilidad por parte del paciente y se ponga a ejercitar de forma continuada su formación de curvatura lateral del raquis de forma anómala.
Ejercicios como natación; especialmente estilo de espalda,
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y crol, muy importante en este estilo que controlemos el movimiento de respiración hacia los dos lados, es decir, el primer dibujo de la segunda columna, lo realicemos unas veces hacia la derecha y otras hacia la izquierda.

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Así como ejercicios en suelo. Aquí os propongo algunos específicos para escoliosis, (método de Klapp)

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 La ejecución es como sigue:

1. Repetimos 10 veces cada uno de los movimientos;

2. Nos mantenemos durante 10 segundos en la última repetición;


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3. Repetimos el paso 1 otras dos veces, intercalándolo con el paso 2.
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Muy importante es la posición que adoptamos en el trabajo:

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Y parar al menos una vez cada hora para elastificar con un ejercicio de rotación que realizamos 1 serie de 5 repeticiones.

 Y para los más peques, estas recomendaciones:

 
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